Existen diferentes métodos para suministrar el oxígeno, así como para administrarlo al paciente, ya sea un paciente hospitalizado o domiciliario.
Suministro de oxígeno
- Sistemas portátiles de de oxígeno (bombonas)
- Almacena oxígeno 100% puro como un gas comprimido a presión en un cilindro especial.
- Cada vez está más en desuso.
- Red central de hospitales (con tomas de pared)
- Consiste en una serie de redes de distribución y lazos de control que permite que el suministro de O2 llegue al paciente con la misma calidad con la que es producido el gas.
- Concentradores de oxígeno
- El concentrador de oxígeno deberá estar equipado al menos con un flujómetro integrado con control de la tasa de flujo.
- Oxígeno líquido
- Permite el almacenamiento de una mayor cantidad de gas en forma más fácil que el oxígeno gaseoso. Un litro de oxígeno líquido al evaporarse equivale a 860 litros de oxígeno gaseoso. Un recipiente con una capacidad de 30 litros de líquido puede suministrar al paciente más de 25.000 litros de oxígeno gaseoso.
Red central de oxígeno Concentrador de oxígeno portátil.
Métodos de administración de oxígeno
- Catéter o sonda nasal.
- Cánula o gafas nasales (se introducen por vías nasales).
- Mascarillas (Venturi, simple, con bolsa...)
- Tiendas de oxígeno.
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